Con incidentes terminó la audiencia de Habeas Data realizada la semana anterior en la Unidad Judicial Tercera de la Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia de Quito, a pedido de un grupo de los 208 policías desvinculados por mala actuación.
La reacción de los malos policías se pasadas las 12h40, al conocer que la jueza de la unidad, Patricia Segarra, había negado la solicitud propuesta por los gendarmes desvinculados.
Según un parte elaborado por personal de la SIAI-Q, al recibir el anuncio, un grupo de exaltados ex policías ironizaron al decir “gracias señora jueza”, para de inmediato amenazar a autoridades del Ministerio del Interior, Comandancia General de Policía, Inspectoría General de Policía, personal de la Dirección General de Investigaciones y familiares de las víctimas de los policías separados de la institución por infracciones administrativas y, otros, por estar vinculados en casos penales.
Según el parte policial, los violentos ex policías espetaron frases con contenido amenazante como “son unos tirados a pulcros y pueden amanecer secándose”. El nivel de amenaza subió cuando dirigiéndose a las autoridades presentes señalaron “afuera vamos a ver lo que pasa, familia tienen y no toda la vida van a estar dentro de la institución. Ya están viejos, están al salir de la institución, esto no es eterno”.
El estado de beligerancia de los policías separados por mala conducta quedó expuesto cuando amenazaron física y verbalmente a personal policial presente en la audiencia y al cual confundieron con integrantes de la Dirección General de Investigaciones, responsable de fundamentar los casos por los que fueron separados los malos policías. Según el parte policial, varios de los amenazados tuvieron que huir de la sala de audiencias, a causa de la agresividad manifestada por los ex policías.
Denuncia
El Ministerio del Interior presentará una denuncia ante la Fiscalía, a efectos de que las amenazas a la vida de sus funcionarios, personal policial y demás asistentes a la audiencia se aclaren y sancione a los responsables, quienes confirman así su accionar beligerante y delictivo que motivó la sanción institucional.
Delitos
La separación de los gendarmes reclamantes se dio a inicios dejunio pasado. La medida corresponde a un proceso administrativo de depuración institucional que busca recuperar la imagen de la Policía Nacional, afectada por la actuación de malos policías. Los gendarmes sancionados estaban vinculados a delitos como secuestro exprés, extorsión, estupro, violencia sexual y familiar. Muchos de estos fueron reincorporados a la institución policial mediante recursos y amparos legales cuya procedencia fue seriamente cuestionada.
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