Las 354 unidades de Policía Comunitaria (UPC) que funcionan en todo el territorio ecuatoriano, dinamizan el trabajo policial y contrarrestan de manera efectiva y eficaz el auge delincuencial, que cada día se ve minimizado por el auxilio inmediato que brinda la Policía a los ecuatorianos.
Estas nuevas y modernas infraestructuras también aportan al Buen Vivir de hombres y mujeres que laboran en estas dependencias policiales. Hoy por hoy, el Policía ha sido dignificado como profesional y goza de las comodidades y una mejor habitabilidad, permitiéndoles cumplir con su misión de proteger y servir a su comunidad, al haber mejorado sus condiciones de vida, un hecho sin precedentes en la historia policial.
Este Nuevo Modelo de Gestión de la Policía Nacional responde a las necesidades y demandas de la ciudanía. Su filosofía es recuperar la confianza a través de un contacto mucho más cercano, aplicando la aplicación de estrategias que apuntan a erradicar los delitos en sus diferentes modalidades.
El Gobierno ha desplegado gigantescos esfuerzos para dotar a la institución policial de las herramientas tecnológicas de última generación, logística y demás medios, que permiten a los miembros policiales cumplir con el juramento de servir y proteger a los conciudadanos.
Según el cronograma planificado, el país contará hasta finales del 2014 con un total de 488 UPC en las 24 provincias del país y 14 unidades de Vigilancia Comunitaria. (UVC). Al momento operan 7 en los Distritos Metropolitano de Guayaquil y Quito, Esmeraldas, Guayas, Los Ríos, Manabí y Tungurahua.
Las UPC y UVC están ubicadas estratégicamente, con la finalidad de abarcar y cubrir grandes sectores poblacionales georefenciados según los delitos.
El personal policial asignado a cada una de estas unidades, está suficientemente capacitado, permitiéndoles interactuar con la comunidad para generar juntamente planes y programas que provoquen solucionar la inseguridad local. Entre ellos se citan “Escuela Segura”, “Barrio Seguro”, “Local Seguro”, que tienen una amplia aceptación ciudadana.
A ello se suma la participación ciudadana que cada vez va en aumento, con la conformación de Brigadas Barriales, que apoyan el trabajo policial en el ámbito preventivo, en el radio de acción que comprende el barrio, la comunidad y el sector donde reside.
Algo que hay que destacar también es la implementación de 744.408 Botones de Seguridad a escala nacional. Este dispositivo de seguridad constituye un factor fundamental en la reducción importante de los delitos más frecuentes que azota a la ciudadana, como son los robos a personas, a domicilios y a locales comerciales.
La consolidación de la Policía Comunitaria y la predisposición de la ciudadanía de ser corresponsable en el ámbito de la seguridad ciudadana, se encamina por la ruta de lograr una convivencia social pacífica.
Esta labor comunitaria ha devuelto la confianza de la ciudadanía en el cuerpo policial, que diariamente frena la actuación de los delincuentes con contundentes golpes y poniendo a órdenes de las instancias correspondientes a quienes actúan al margen de la ley.