Con un minuto de silencio en honor a los policías fallecidos en los últimos días en la Provincia del Guayas, el Arzobispo Castrense de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional del Ecuador, Mons. Miguel Ángel Aguilar, presentó el saludo protocolario a las autoridades de Policía del Comando de la Subzona Guayas No.5.
En el marco de una Misa Campal realizada a las 09h30 en las instalaciones del Comando Guayas, ubicado en la Parroquia El Recreo, Cantón Durán, las plegarias fueron direccionadas a los miembros policiales que diariamente velan por la seguridad de las personas y sus bienes cumpliendo con su compromiso de “Servir y Proteger”
Cuidar con gran dedicación la seguridad de los ciudadanos, fomentar el respeto y amor al prójimo fue el mensaje central en el sermón que dedico a todos los más de cien uniformados policiales presentes.
El Comandante Provincial de Policía Guayas Crnl. Edison Gallardo Bedòn previo a la Santa Misa, recibió en su despacho la visita protocolaria de la autoridad eclesiástica, intercambiando pensamientos sobre la misión pastoral de la Iglesia dentro de la Policía Nacional.
De igual forma el Monseñor resalto la labor que cumple el policía y la importancia de conocer que hay hombres y mujeres de paz, que han sido preparados para defender los derechos de la ciudadanía y pese a que diariamente arriesgan sus vidas y sus familias en el ejercicio de su profesión cada día luchan por el beneficio de los demás.
Finalmente resalto la importancia y el valor que tiene la familia en la sociedad y sobre el fundamental amor y respeto a los preceptos de vida que deberían ser aplicados diariamente en cada hogar para lograr una vida prospera y feliz.
El Arzobispo Castrense de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional del Ecuador, Mons. Miguel Ángel Aguilar, presentó el saludo protocolario a las autoridades de Policía de la Zona 8, Distrito Metropolitano Guayaquil, DMG, y en el marco de una Misa Campal en el Cuartel Modelo, Guayaquil, pidió a los miembros policiales que cuiden con esmero la seguridad de los ciudadanos, como una forma de manifestar el amor al prójimo.
El Comandante de la Zona de Policía No. 8. Gral. Patricio Pazmiño Castillo, previo a la Santa Misa, recibió el saludo protocolar en su despacho, donde por un lapso de 15 minutos intercambiaron pensamientos sobre la misión pastoral de la Iglesia dentro de la Policía Nacional. El Gral. Pazmiño estuvo acompañado de su esposa Fátima Hidalgo de Pazmiño.
El Monseñor en su homilía resalto la labor que cumple el policía y que es importante saber que hay hombres que han sido preparados para defender los derechos de la ciudadanía y que la presencia de los uniformados policiales en las calles y las plazas de todo el país, es vital para que la comunidad se sienta protegida y nadie se atreva hacer actos que vayan en contra de la sana convivencia.
“La Policía está integrada por hombres libres y capaces de las más grandes entregas y de codearse muchas veces con los actos heroicos, por el trabajo que ejecutan y que muchas ocasiones están cerca de la violencia, cerca de la muerte” expresó el Obispo castrense, al tiempo de pedir a los uniformados dejar que Jesús entre en sus vidas y en el seno de la Policía Nacional del Ecuador.
Pidió finalmente por el descanso eterno de los miembros policiales que han caído en el cumplimiento del deber, de manera particular los 3 miembros policiales Marco Rodrigo Morales, Antonio Enrique Castro Quiroz, Félix Luna Moran, que fallecieron trágicamente en accidentes de tránsito ocurridos en la vía a Santa Elena y en Guayaquil.
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