domingo, 1 de marzo de 2015

PARTICIPACION CIUDADANA EN MATERIA DEL ORDEN PÚBLICO.


El principal interesado que el orden público sea una realidad, no una teoría bonita, ni una entelequia más difícil de explicar que las nebulosas de Laplace, ni un dogma de Fe, es el ciudadano, el habitante del sector, barrio, comuna, recinto, pueblo, ciudad.
En la toma de decisiones en materia de seguridad ciudadana es adecuado tomar en cuenta la opinión del ciudadano, por eso decimos que siempre se debe actuar en TRILOGIA: Ciudadanía, funcionarios del régimen dependiente en materia de seguridad (policías) y Autoridades.
La ciudadanía, de manera organizada, está participando en materia de Seguridad Ciudadana, inicialmente en una organización que se llamó “Brigadas Barriales de Orden y Seguridad”,  lo cual hace pocos años se transformó en “Brigadas Barriales de Seguridad Ciudadana” y finalmente, desde el 24 de Julio del 2014 en: Asambleas Comunitarias de Seguridad Ciudadana, Asambleas Comunitarias de Solidaridad Ciudadana, Comités Barriales de Seguridad Ciudadana, u otras formas asociativas en el ámbito de la competencia complementaria y de la colaboración de los mismos en materia de seguridad.

EL INICIO DE LAS BRIGADAS, HACE 17 AÑOS ATRÁS
Brigadas Barriales fué un voluntariado cívico, sin fines de lucro, sin relación de dependencia, un apostolado, que surgió hace ya 17 años, vivíamos la guerra del Cenepa, personal policial fue enviado a la frontera, aumento la percepción de inseguridad especialmente en los barrios marginales de las ciudades y en el campo. Es por esta razón que oficiales de Policía, sin presupuesto, decidieron organizar las brigadas barriales con ciudadanos de la patria.

Eran Brigadas Barriales de Orden y Seguridad.

En aquellos tiempos habían pocos policías, no tenían buen sueldo, ni buenos equipos, ni nada que valga la pena, habían casos de corrupción en los que estaban involucrados policías, los brigadistas barriales salían a realizar acciones reactivas y disuasivas, o sea, salían a realizar acciones policiales: cacheos, requisas, someter a delincuentes.
Hubieron muchos excesos, es verdad, pero ante todo, lo trágico fue que muchos buenos brigadistas perdieron la vida, o tuvieron que mudarse a vivir a otro sector por la amenaza de muerte que recibían de los delincuentes.
ASÍ ERAN LAS COSAS, no habían muchos policías, y entre los policías habían delincuentes uniformados, los BRIGADISTAS tenían que someter ladrones, y enfrentarse incluso al personal policial que defendía a ciertos delincuentes o que participaban en delitos: robos en las guardarrayas, entre otras cosas.
La gente de los barrios populares y los campesinos sabían que tenían que actuar, no les quedaba de otra.
Las brigadas barriales debían pararse tieso, para no dejarse sorprender de ciertos Jefes Policiales y para no dejarse intimidar de los delincuentes.
En la Provincia del Guayas el aglutinante de las brigadas barriales de seguridad ciudadana tiene un nombre: Ab. Mercedes Mero de Espinoza. Una verdadera Líder
Mujer valiente, honesta, decidida, agrupo en torno a si a muchos habitantes de los barrios marginales, los BRIGADISTAS barriales aún recuerdan a Johnny Manjarrez, Francisco Palacios, Renzo Freire y otros brigadistas que supieron hacerse respetar, incluso de los mismos policías.
La Ab. Mercedes Mero de Espinoza murió de cáncer, a su entierro no fue ningún Jefe de Policía pero si enviaron a personal policial de tropa, que la escoltaron en su viaje a la eternidad.

LAS BRIGADAS BARRIALES DE SEGURIDAD CIUDADANA, AMPARADOS EN EL ACUERDO MINISTERIAL 1845

Con la Creación de la Dirección Nacional de Policía Comunitaria, con la des centralización y organización en Distritos, Circuitos y Sub circuitos, el mejoramiento de sueldos, equipos, y aumento de personal policial se busca que las acciones de la Policía sean más efectivas.
Las Brigadas Barriales de Orden y Seguridad con el Acuerdo ministerial 1845 cambiaron de nombre, pasaron a ser Brigadas Barriales de Seguridad Ciudadana y perdieron la posibilidad de realizar acciones reactivas y disuasivas, ya no se puede ni siquiera usar tolete, se convirtieron en organizaciones preventivas, proactivas, educativas, en otras palabras, DEBIERON SER participación ciudadana, que se acogen al art. 95 de la Constitución.
Brigadas Barriales de Seguridad Ciudadana DEBIERON SER una organización de Participantes Ciudadanos, y acogerse al art. 96 de la Constitución.
Debieron actuar en TRILOGIA: autoridades, funcionarios del régimen dependiente y ciudadanía, al menos así lo establece el art. 100 de la Constitución.
Lastimosamente, permanecieron inamovibles actos de corrupción, como por ejemplo, que la directora provincial del Guayas no es brigadista, vive en Guayaquil, pero ella, sus dos hijos, y un vecino están inscritos como brigadistas de Daule, como que vivieran en la Villa de Daule.
No olvidemos que cuando fueron “brigadas barriales de orden y seguridad” también hubieron casos de corrupción y de prepotencia tan graves como el que salió publicado en Diario El Universo el 21 de Marzo de 1998: “500 Personas Intentaron Tomarse La Asamblea”
Errare humanum est, errar es humano, pero… ¿volver a cometer el mismo error?, mmm, ya no estamos hablando de error.
Así como los policías corruptos son sacados de la Institución, son dados de baja, de la misma forma hay que actuar con aquellos que, amparándose en la “Participación Ciudadana” pretendan efectuar pingues negocios.

ACUERDO MINISTERIAL 4517: ASAMBLEAS DE SEGURIDAD CIUDADANA.

El Ministerio del Interior ha lanzado en el País la Campaña: "Solidaridad Ciudadana, Seguridad Ciudadana", esta herramienta facilitara al POLCO (Policía Comunitario) y al poblador construir Asambleas en cada UPC, para trabajar en conjunto en temas de previsión (diagnostico) y prevención de incidentes, contravenciones y delitos.
Participación Ciudadana, consciente y organizada, eje de seguridad en Ecuador.
Lo importante es que la comunidad genere una participación consciente y organizada que acompañe el proceso de equipamiento y capacitación de la Policía Nacional y la mejora enérgica de la función judicial.
Sin triunfalismos, se debe incentivar el establecimiento de auténticas Asambleas de Seguridad y Participación Ciudadana.
No se trata de convertir a la Ciudadanía en actores de operativos ni informantes, sino ocupar el tiempo libre, los espacios públicos de encuentro ciudadano y prever pequeñas cosas que pueden originar violencia.
La Asamblea se une a la Policía Nacional y coordina soluciones en el barrio.
Lo que se está implementando es una política pública y un concepto de ciudadanización de la seguridad, en la que parte de los actores son los ciudadanos.

En base a la GUIA DE SOLIDARIDAD CIUDADANA:
1.- Se determina las problemáticas.
2.- Se determina que se hizo en el territorio para enfrentar el problema.
3.- Diagnostico y recomendaciones de prevención.
4.- Relatos de la gente con propuestas de cambio y mejoría en seguridad.

La idea es compartir con quienes se involucren, recoger experiencias positivas y consolidarlas en el territorio.
Vivimos en un cambio de época, la realidad actual es que la informática, la telemática y la robótica están haciendo cambiar muy rápidamente la forma de pensar, trabajar y vivir en la sociedad.
Estamos en la Era del Conocimiento, es muy importante ser catalizadores de los procesos de Participación  Ciudadana, fortalecer el Poder Ciudadano, establecer la Trilogia tal y como lo establecen la Constitución y las Leyes pertinentes.